El ajedrez es un bien cultural que acompaña a la humanidad desde hace más de dos mil años, y contribuye a desarrollar una enorme cantidad de habilidades intelectuales y de valores éticos, por lo que se considera un elemento muy importante en la formación de niños y jóvenes.
El ajedrez estimula un pensamiento profundo y elaborado,
la creación de estrategias, la valoración de la perspectiva del otro,
la evaluación posterior de las acciones realizadas, la formulación de
teorías, el respeto a la pluralidad de opiniones entre tantas otras
cosas.
Brinda a padres y educadores una herramienta muy poderosa en una de las tareas más importante que tenemos por delante: el mejoramiento permanente de nuestros modos de convivir en una comunidad madura y proactiva, capaz de construirse a sí misma desde los principios de igualdad, solidaridad y respeto mutuo. Fuente: http://www.centrosmec.org.uy
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